Desayuno con huevos

Hay muchas anécdotas buenas del pre, de algunas me acuerdo de otras no. Retomando el tema de los matutinos donde el negro de producción dijo piiiii, me trae a la memoria un par de historias más.

La primera: Cuando química 2 preparó un matutino donde, en una parte decía: "el ciclón no le había dejado ni donde amarrar la chiva", y ... la ¡chiva y Danny no aparecían!, o mejor aún, aparecieron con Danny casi ahorcándola halándola por la soga y por detrás se veía a Deivis todo lleno de fango empujándola en el medio de la plataforma.

La segunda: Se conmemoraba el 13 de marzo y como teníamos mucha “imaginación” decidimos hacer algo diferente, dramatizado, con un carro, con rifles, disparos, muertes y hasta una marcha de protesta. Hasta aquí genial, nos quedaba buscar las cosas, hablamos con el director para el coche, con el profe de preparación militar pa las escopetas, la marcha era cosa de nosotros y el muerto, Danny de nuevo. Solo quedaba la sincronización, primero la marcha, luego que se preparara Danny (pa lo del muerto) y los otros (Deivis y yo al carro) para salir por detrás de la gente y dispararle al futuro muerto (Danny) y luego a regresar todos, para un coro hablado.

Preparamos los lemas (pa la marcha), buscamos los rifles (pa los disparos), convencimos a Danny para que ensayara (pa lo del muerto), calculamos el tiempo de regreso a la tribuna (pa lo del coro hablado) en fin todo bajo control.

Primero la marcha, todo iba bien pero… era una marcha en contra de Batista y de momento se oye en la plaza, ¡Abajo el Directorio Revolucionario!, ¡Abajo!, todos nos miramos pero seguimos gritando, algo empezó mal, los del carro salimos disparados, ya dentro con el loco del chofer a toda velocidad , yo ni encontraba la escopeta que se suponía estaba allí, cuando se detuvo el carro en el medio de la plaza y yo medio mareado, ¡sorpresa!, ya el muerto (Danny) estaba en el suelo, en su posición final, y hasta con sangre (puré de tomate), ya que habíamos llegado hasta allí y por si se está haciendo el muerto, le dimos, ante el asombro de la multitud, un par de tiros extras y de regreso.

A la vuelta , de carrera, agarra tus papeles pal coro y, ¡sorpresa!, la gente del coro había salido pal escenario, igual nos incorporamos aún sudando y respirando fuerte y ¡sorpresa!, parece que de tanta carrera y tanto disparo a alguien se le fue un peo (o se lo tiró, mejor ocasión ninguna), bueno la atmosfera se puso densa (literalmente) y entre mis risa, las del alemán (ese al igual que Romel era otro que cuando le daba por reírse no había quien lo parara), las de un par de jodedores más (había bastante en ese grupo) y la incomodidad de algunos, nos desayunamos sin previo aviso, el huevo cocido que alguien había comido la noche anterior, así terminó la historia.

PD. la foto no es del pre, la tomé prestada del ciberespacio.